Ícaro nace de nuestro afán de seguir evolucionando y ofrecer al mercado productos únicos, representativos de su región y del viñedo con el que se elaboran.
Los viñedos que utilizamos para elaborar Ícaro se encuentran en una zona especialmente cálida de la Denominación de Origen Valencia, donde la climatología extrema produce una mayor concentración en las uvas y una estructura característica en sus vinos.
Ícaro representa la potencia y la elegancia, una marca versátil que refleja a la perfección nuestro terroir más extremo.
Terroir: Seleccionamos nuestras mejores parcelas de Macabeo, situadas en la zona central de la Denominación, con una edad promedio de 25 años. Los suelos son arcilloso-calcáreos, con una gran cantidad de piedra y muy pobres, lo que limita los rendimientos máximos a menos de 7.000 kg por hectárea, aumentando así la competencia entre las cepas. La vendimia se realiza manualmente en cajas de 20 kg durante la primera quincena de septiembre.
Vinificación: Realizamos una primera selección en el viñedo, respetando los rendimientos máximos, seguida de una segunda selección en mesa antes de la elaboración. Tras un suave estrujado, el mosto se encuba en depósitos de acero inoxidable donde fermenta y macera en contacto con sus hollejos durante 20 días, con remontados constantes. La fermentación maloláctica tiene lugar en depósitos de acero inoxidable en contacto con sus lías.
Crianza: Este vino no pasa por crianza en barrica, lo que le permite ganar estructura durante al menos 3 meses de permanencia en depósito, seguido de un posterior afinamiento en botella.
Color: Amarillo limón, limpio y brillante.
Aroma: Aromas frescos varietales, con notas cítricas y ligeramente tropicales.
Gusto: Destaca por su frescura y sus notas cítricas. Presenta un cuerpo ligero, una acidez equilibrada y un retrogusto muy agradable.
Maridaje: Ideal para acompañar todo tipo de pescados, ya sea a la parrilla o al horno. También se complementa bien con arroces, carnes blancas y quesos frescos.
Terroir: Seleccionamos nuestras mejores parcelas de Tempranillo, ubicadas en la zona central de la Denominación, con una edad media de 25 años. Los suelos son arcilloso-calcáreos, con una gran cantidad de piedra y muy pobres, con rendimientos máximos inferiores a 7.000 kg por hectárea, lo que incrementa la competencia entre las cepas. La vendimia se realiza manualmente en cajas de 20 kg durante la segunda quincena de septiembre.
Vinificación: Realizamos una primera selección en el viñedo, respetando los rendimientos máximos, seguida de una segunda selección en mesa antes de la elaboración. Tras un suave estrujado, el mosto se encuba en depósitos de madera de 20.000 kg donde fermenta y macera en contacto con sus hollejos durante 22 días, con remontados constantes.
Crianza: El vino pasa por una crianza de 6 meses en barricas de roble americano de 225 litros de capacidad, de segundo y tercer año, que aportan estructura sin condicionar la tipicidad varietal del Tempranillo.
Color: Rojo cereza, con reflejos violáceos.
Aroma: Presenta intensos aromas frescos a fruta roja, especialmente cereza y ciruela.
Gusto: Destaca por su estructura y untuosidad, con intensas frutas rojas ligeramente maduras que aportan un cuerpo elegante y completo. Tiene una acidez media y un agradable retrogusto.
Maridaje: Es muy versátil para maridar con una gran variedad de platos, especialmente carnes asadas, quesos semicurados y curados, pastas, arroces y cualquier plato de comida mediterránea, incluso pescados ligeramente grasos.
Terroir: Seleccionamos nuestras mejores parcelas de Garnacha, ubicadas en la zona central de la Denominación, con una edad media de 30 años. Los suelos son arcilloso-calcáreos, con una gran cantidad de piedra y muy pobres, con rendimientos máximos inferiores a 6.500 kg por hectárea, lo que incrementa la competencia entre las cepas. La vendimia se realiza manualmente en cajas de 20 kg durante la segunda quincena de septiembre.
Vinificación: Realizamos una primera selección en el viñedo, respetando los rendimientos máximos, seguida de una segunda selección en mesa antes de la elaboración. Tras un suave estrujado, el mosto se encuba en depósitos de madera de 20.000 kg donde fermenta y macera en contacto con sus hollejos durante 22 días, con remontados constantes.
Crianza: El vino pasa por una crianza de 6 meses en barricas de roble americano de 225 litros de capacidad, de segundo y tercer año, que aportan estructura sin condicionar la tipicidad varietal de la Garnacha.
Color: Rojo fresa de intensidad media, limpio y brillante.
Aroma: Presenta intensos aromas frescos a fruta roja, especialmente fresa y frambuesa.
Gusto: Destaca por la explosión de fruta en boca. Es fresco, redondo, estructurado y elegante.
Maridaje: Su gran cantidad de fruta lo hace ideal para combinar con todo tipo de platos de la cocina mediterránea, especialmente quesos, arroces, carnes asadas y cualquier tapa.
Terroir: Seleccionamos nuestras mejores parcelas de Tempranillo y Merlot, situadas en la zona central de la Denominación, con una edad media de 35 años. Los suelos son arcilloso-calcáreos, con una gran cantidad de piedra y muy pobres, lo que limita los rendimientos máximos a menos de 6.500 kg por hectárea, aumentando así la competencia entre las cepas. La vendimia se realiza manualmente en cajas de 20 kg durante la segunda quincena de septiembre.
Vinificación: Llevamos a cabo la vinificación por separado de cada variedad. Realizamos una primera selección en el viñedo, respetando los rendimientos máximos, seguida de una segunda selección en mesa antes de la elaboración. Tras un suave estrujado, el mosto se encuba en depósitos de madera de 20.000 kg donde fermenta y macera en contacto con sus hollejos durante 22 días, con remontados constantes.
Crianza: El vino pasa por una crianza de 12 meses en barricas de roble americano de 225 litros de capacidad, de segundo y tercer año. Posteriormente, se realiza un afinamiento en botella durante al menos 6 meses más.
Color: Rojo granate, de intensidad media.
Aroma: Presenta intensos aromas a fruta roja, pimienta y regaliz.
Gusto: Destaca por su frescura y su cuerpo medio. Tiene una importante carga frutal, con ligeros toques amaderados bien integrados. Es redondo, estructurado y elegante.
Maridaje: Tiene una gran versatilidad para maridar con una amplia variedad de platos, destacando asados, quesos semicurados, cocidos y cualquier tipo de carne en general.
Terroir: Seleccionamos nuestras mejores parcelas de Tempranillo y Garnacha, ubicadas en la zona central de la Denominación, con una edad media de 35 años. Los suelos son arcilloso-calcáreos, con gran cantidad de piedra y muy pobres, lo que limita los rendimientos máximos a menos de 6.500 kg por hectárea, aumentando así la competencia entre las cepas. La vendimia se realiza manualmente en cajas de 20 kg durante la segunda quincena de septiembre.
Vinificación: Llevamos a cabo la vinificación por separado de cada variedad. Realizamos una primera selección en el viñedo, respetando los rendimientos máximos, seguida de una segunda selección en mesa antes de la elaboración. Tras un suave estrujado, el mosto se encuba en depósitos de madera de 20.000 kg donde fermenta y macera en contacto con sus hollejos durante 22 días, con remontados constantes.
Crianza: El vino pasa por una crianza de 19 meses en barricas de roble francés (50%) y americano (50%) de 225 litros de capacidad, de segundo y tercer año.
Color: Rojo carmesí, de intensidad media.
Aroma: Presenta intensos aromas a fruta negra ligeramente madura, regaliz y pimienta. También pueden aparecer aromas a pan tostado y fruta compotada.
Gusto: Destaca por su calidez y amabilidad en boca. La madera es elegante y está muy bien integrada con la fruta. Tiene un cuerpo medio y taninos elegantes y persistentes.
Maridaje: Sus toques amaderados y sus aromas a fruta madura lo hacen ideal para maridar con todo tipo de carnes, asados, quesos curados y platos de sabor.
El cultivo de la vid en Castilla ha sido la actividad principal de la región durante varias décadas, llegando a ser considerada como una de las principales regiones vitivinícolas de todo el mundo. Su clima cálido, con una gran cantidad de horas de sol, junto con la escasez de lluvias y la predominancia de un suelo calizo-arcilloso, crean unas condiciones idóneas para la producción de vinos de gran calidad. La elaboración de variedades internacionales, tales como el Cabernet Sauvignon, el Merlot o el Chardonnay, ha permitido que Castilla tenga una gran presencia en los principales mercados internacionales.
